Misofonía: el 20% de la población podría sufrir esta fobia a los ruidos

En un mundo cada vez más ruidoso, una parte significativa de la población estaría lidiando con una fobia poco conocida y a menudo incomprendida: la misofonia. Este trastorno del sistema auditivo se caracteriza por una intolerancia extrema a sonidos específicos que generan en el individuo reacciones emocionales negativas intensas. Aunque ha sido identificada recientemente, la misofonia podría afectar hasta al 20% de la población.

Definición y síntomas de la misofonía

¿Qué es la misofonía ?

La misofonía, también conocida como «odio al sonido», es un trastorno neurológico caracterizado por una aversión extrema a ciertos sonidos específicos, normalmente producidos por otra persona. Estos pueden ser tan comunes y cotidianos como masticar, estornudar, toser o incluso respirar.

Síntomas comunes de la misofonía

Los individuos con misofonía experimentan una serie de síntomas desencadenados por los sonidos que les resultan incómodos. Estas respuestas pueden variar desde irritabilidad y ansiedad hasta disgusto, cólera e incluso comportamiento agresivo.

Antes de continuar con las posibles causas de este trastorno, veamos algunos ejemplos sonoros que suelen desencadenar reacciones en las personas con misofonía.

• Ruido al masticar o sorber.
• Tos y estornudos.
• Respiración pesada o ronquidos.
• Clics de botones o teclas.
• Sonido al crujir papel o plástico.

Estos son solo algunos ejemplos. La lista de sonidos que pueden desencadenar una reacción es tan diversa como las personas que sufren este trastorno.

Las posibles causas de la misofonía

Bases genéticas y ambientales

Aunque la causa exacta de la misofonia aún se desconoce, los estudios sugieren que puede tener un componente genético y estar influenciada por factores del entorno en el que se desarrolla el individuo.

Conectividad cerebral

Otra teoría propone que la misofonia podría ser resultado de una conectividad elevada entre diferentes regiones del cerebro responsables de procesar los sonidos y las emociones. Este fenómeno llevaría a una respuesta emocional exagerada a ciertos sonidos.

Después de entender qué es la misofonía y cuáles podrían ser sus causas, nos preguntamos entonces, ¿cómo se diagnostica ?

¿Cómo diagnosticar la misofonía ?

Evaluación clínica

El diagnóstico de la misofonía se realiza principalmente mediante una evaluación clínica detallada, que puede incluir entrevistas con el paciente y pruebas audiológicas para descartar otros trastornos del sistema auditivo.

Herramientas de diagnóstico

Existen también cuestionarios y escalas que pueden ayudar a identificar la misofonía, como la Escala de Misofonía de Amsterdam (A-MISO-S).

A pesar del desconocimiento generalizado sobre este trastorno, la misofonía podría ser bastante común. Veamos qué nos dicen las estadísticas al respecto.

Prevalencia: una fobia más común de lo que se piensa

Como podemos ver, alrededor de una quinta parte de la población podría estar lidiando con esta condición en su día a día. Pero, ¿cómo afecta realmente la misofonía a las personas que la padecen ?

La misofonía en el día a día: impactos y testimonios

Efectos en la vida cotidiana

Las reacciones aversivas provocadas por la misofonia pueden tener un efecto significativo en el bienestar emocional y social del individuo, dificultando actividades diarias como comer en compañía o concentrarse en espacios ruidosos.

Testimonios personales

Muchos pacientes describen sentirse incomprendidos e incluso juzgados por sus reacciones, aumentando sus niveles de estrés y ansiedad.

Afortunadamente, existe una creciente conciencia sobre esta condición y se están investigando diferentes enfoques para ayudar a las personas con misofonía.

Enfoques terapéuticos para tratar la misofonía

Terapia cognitivo-conductual

La terapia cognitivo-conductual es una de las más recomendadas para manejar la misofonía. Esta terapia busca cambiar los patrones de pensamiento negativo que desencadena el sonido aversivo.

Técnicas de relajación y mindfulness

Otras técnicas como la meditación y el mindfulness pueden también ser útiles para aprender a gestionar las emociones negativas asociadas a los sonidos aversivos.

Para finalizar este recorrido por la misofonía, abordaremos su reconocimiento social e institucional.

Desafíos sociales y reconocimiento del trastorno

Reconocimiento social

A pesar del impacto significativo que puede tener en la vida cotidiana, la misofonía aún no es ampliamente reconocida ni entendida por la sociedad en general. Esto puede generar sentimientos de soledad y frustración en quienes padecen este trastorno.

Lucha por el reconocimiento médico-institucional

A nivel médico e institucional, también hay camino por recorrer para que la misofonía sea plenamente reconocida como un problema de salud pública que merece investigación y recursos para su tratamiento.

El mundo de la misofonía es aún un terreno inexplorado en muchos sentidos. Pero cada vez hay más investigaciones que se adentran en este trastorno, permitiendo que se visibilice y ampliando las opciones de tratamiento para quienes lo sufren. Mientras tanto, es fundamental fomentar la empatía y la comprensión hacia quienes enfrentan esta condición en su día a día.